En el Día Mundial de la Salud Mental, se busca concienciar a toda la población en la identificación, tratamiento y prevención de algún trastorno emocional o de conducta destacada con este tema.
Cada vez hay más personas que sufren algún tipo de problema relacionado con la salud
mental, uno de los motivos es el estrés, el ritmo de vida frenético y de rapidez que llevamos a diario.
El Día de la Salud Mental, ha sido establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el propósito de cambiar nuestra forma de ver a las personas que padecen enfermedades mentales. En todo el mundo hay unos 400 millones de personas que sufren trastornos mentales, neurológicos u otro tipo de problemas relacionados con el abuso de alcohol y drogas.
Cuando hablamos de trastornos mentales, hacemos referencia al pensamiento humano y todas sus funciones, las cuales pueden desmoronarse como un castillo de arena y verse afectadas por diferentes enfermedades que pueden aparecer en cualquier momento de la vida, desde la infancia hasta la vejez. No hay personas inmunes a los trastornos mentales, no importa el país de residencia ni la clase social.
La salud mental no es sólo problema de unos pocos (un 12% de la población mundial) sino que es un problema que nos concierne a todos, cada uno de nosotros y nosotras. Es necesario tomar consciencia de que quienes padecen enfermedades mentales necesitan menos exclusión, menos discriminación, más ayuda para poder desarrollarse y vivir mejor.
La Organización Mundial de la salud dio a conocer una serie de medidas para detectar los indicadores podrían señalar que una persona tiene potencial suicida y la manera de
prevenirlo.
- Preguntar sobre el suicidio no provoca el acto en sí. Por lo general reduce la ansiedad y ayuda a las personas a sentirse comprendidas.
- Anímela a pedir ayuda a un profesional, como un médico, un profesional de salud
mental. - Si cree que la persona corre un peligro inmediato, no la deje sola. Pida ayuda profesional a los servicios de emergencia, a un teléfono de asistencia para personas en crisis.
- Si la persona por la que está preocupado vive con usted, asegúrese de que no tenga acceso a medios para autolesionarse.
- Mantenga el contacto con dicha persona para comprobar que está bien